ANTONIO PELÁEZ, PINTOR DE LLANES Y DE MÉXICO

 

Autorretrato. Óleo sobre lienzo, 61 x 52 cm. (1955) 

Antonio Peláez Vega nació en Llanes (Asturias) en 1921 y estudió el bachillerato en el Instituto Pérez Galdós de Madrid. ​En 1936 emigró con su familia a México, y allí abrirían sus padres una tienda de comestibles. Al año siguiente, adquirió la ciudadanía mexicana y se matriculó en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado "La Esmeralda". 

Comenzó su carrera artística en la década de 1940, en el taller de Jesús Guerrero Galván, haciendo retratos y autorretratos. Viajó a París, Madrid, Nueva York, Milán, Salónica y Constantinopla, y estudió la obra de Antoni Tàpies, Jean Dubuffet, Robert Motherwell y Mark Rothko, entre otros.  

En los años 50, el contacto personal y artístico con Rufino Tamayo propició su paulatino abandono de la pintura figurativa. Derivó al arte abstracto y se centró en la textura, el color, el tacto y el uso del espacio, empleando trozos de rocas, esferas y colores (sobre todo, el ocre, el amarillo y el blanco). Llegado a la abstracción, la crítica vio en sus trabajos influencias de Nicolás de Stäel y de Tàpies. 

Según Olivier Debroise, lo más sustancial en la pintura de Antonio Peláez, “no es lo que se ve, sino lo que existe y no es inmediatamente perceptible”. La Tierra y su relación con el Sol, la Luna y las estrellas serán el centro de muchas de sus pinturas. Octavio Paz destacó en él “la voluntad de orden y el impulso poético, la geometría y el juego”.

Su primera gran muestra individual fue en 1952, en la Galería de Arte Contemporáneo de México. Fue presentado por  Frida Kahlo, que dijo de él: “Peláez ha captado la esencia de lo mexicano y su obra me parece prodigiosa como contenido y por su calidad humana y social. El pueblo puede enorgullecerse de tener a un pintor tan admirable, conocedor de su oficio, de su papel dentro de la sociedad, consciente de la belleza que ofrece a los ojos de México y del mundo con la humildad más honrada y limpia”. 

En 1956, publicó el libro titulado “21 mujeres mexicanas”, en el que se incluyen  retratos de Dolores del Río, Elena Garro y de Frida Kahlo, con textos de Jorge Luis Borges, Octavio Paz y Diego Rivera, entre otros.

Expuso en Francia, España e Israel, y obtuvo notable éxito en la X Bienal de Sao Paulo. Obras suyas forman parte de los fondos del Museo de Arte Moderno de Madrid y de instituciones de Tel-Aviv y Filadelfia. En 1973, el Palacio de Bellas Artes de México le dedicó una retrospectiva. La última exhibición en vida fue en 1981, en el Museo de Arte Moderno de la capital mexicana. Falleció en 1994, a los 73 años, en la Ciudad de México. 

Margarita Alonso Saiz

A. Peláez:  Las ventanas . Óleo sobre tela, 82 x 110 cm. (1977)

Proyecto para tapiz, sin título. Mixta técnica sobre papel, 60 x 48 cm. (1972)

El color de la arena. Óleo sobre tela, 185 x 140 cm. (1966)